miércoles, 22 de agosto de 2012

Propiedades de la Cola de Caballo

                              


La cola de caballo es muy conocida en todo el mundo por sus numerosos propiedades como la gran acción astringente y antihemorrágica en la mucosa del aparato uranario.

Otra de sus propiedades como planta es su potencial restaurador de los tejidos pulmonares después de infecciones graves, como la bronquitis y tuberculosis. Activa la coagulación de la sangre en las hemorragias nasales, hemorroides y en las hemorragias menstruales.

La cola de caballo se puede utilizar como infusión en prácticas externas de la piel, en forma de comprensas mojadas para heridas como los herpes, eccemas, llagas en la boca y úlceras.

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Se aconseja a los deportistas y personas mayores que padecen de dolores articulares y ayuda a favorecer la flexibilidad de los tendones y de las paredes vasculares.

Beneficios de la cola de caballo
Como propiedades terapéuticas la cola de caballo es rica en potasio, selenio, silice y calcio, por eso es muy beneficiosa en la estructura ósea del organismo. Es diurética y se emplea para estimular las funciones renales.

Corta las hemorragias por su propiedades como remineralizante y hemostática, depura la sangre y regenera las células muertas. Se puede utilizar en las dietas, pues ayuda a perder peso por su propiedad diurética que contribuye a eliminar la demasía de líquidos y las toxinas.
Como suplemento de belleza fortalece las uñas y el cabello, empleado para el crecimiento del cabello, mejorando el aspecto y corrigiendo debilidades en las uñas.


Lo ideal para la piel es tomar tres infusiones de cola de caballo al día o si es en comprimido, se recomienda seis al día.
La infusión de cola de caballo se prepara hirviendo el agua a la cual se le añade las dos cucharadas de hierba, se tapa y se deja reposar durante cinco minutos, para servir, se cuela y se bebe.





viernes, 17 de agosto de 2012

Tabla china para predecir sexo del bebé


La tabla china es una tradición oriental para predecir el sexo del futuro bebé.
La tabla china es uno de los sistemas más conocidos para predecir el sexo del bebé. La predicción del sexo del bebé se puede usar como guía, en caso de que tengas curiosidad por saber antes de que nazca, si el bebé que llevas en tu barriga será un niño o una niña.
Tener una idea del sexo del bebé antes del parto puede ser muy útil para anticipar compras, elegir nombre o escoger los colores más adecuados para decorar su habitación.

¿Te gustaría saber el sexo de tu futuro bebé?
Desde hace cientos de años, circula esta tabla china que precide el sexo del bebé calculando la sinergia entre dos parámetros. Para predecir el sexo de tu futuro bebé, la tabla china determina, considerando la edad de la madre y el mes en que tu bebé fue concebido, el sexo del hijo que vendrá al mundo.

En el caso de que la madre haya nacido en cualquier mes que no sea enero y febrero, su edad lunar es su edad actual más 1 si ya pasó el cumpleaños en el momento de concebir. Si naciste en enero o a comienzos de febrero, súmale 2 años si en el momento de concebir ya había pasado su cumpleaños.

¿Será niño o niña?
Cuenta la leyenda, que esta tabla fue enterrada en una tumba de la familia real china hace 700 años. Actualmente, el original está guardado en el Instituto de Ciencia de Pekín. Al parecer, cuando se usa bien, la tabla acierta en un 90 por ciento de los casos. Sin embargo, no hay estudios científicos al respecto. Debes tener en cuenta que puede haber variaciones, si desconoces el momento exacto de la concepción, sobre todo, si se ha producido a caballo entre dos meses, o si tienes una menstruación irregular.
En ambos casos, es posible que los resultados no sean fiables para predecir si el bebé será niño o niña. No obstante, si todavía no estás embarazada, sólo debes intentar concebir en el mes correspondiente al sexo que desees de acuerdo a esta tabla. Y si ya estás embarazada, esta tabla china también te sirve para conocer el sexo del bebé que llevas dentro.

Tabla china para predecir el sexo del bebé
Para usar esta tabla, sólo debes buscar el casillero de acuerdo al mes en que concebiste, aproximadamente 2 semanas después de la fecha de tu última menstruación, y la edad que tenías en ese momento. Su lectura es muy sencilla: en las columnas verticales aparecen los meses del año y en las filas horizontales la edad de la madre. Escoge el mes en el que se produjo la concepción y la edad de la madre en dicho momento.


H = Hombre M = Mujer
Nota: Es necesario aclarar que GuiaInfantil.com no garantiza los resultados de esta tabla. Su publicación se basa en el concepto único de orientación.


jueves, 16 de agosto de 2012

Remedios caseros para curar la gota


La enfermedad conocida como gota se origina, principalmente, por la acumulación excesiva de ácido burico en el organismo. Esta puede ser producto de una alimentación desordenada pero tambiín a una deficiente eliminación de dicho ácido del cuerpo. Prueba con algunos de estos remedios caseros contra la gota...

 Acaso los mejores remedios naturales para la gota son las cerezas y las fresas. Estos frutos tienen la particularidad de facilitar la eliminación natural de ácido úrico del cuerpo. Por ende, nada mejor que aumentar el consumo de estas frutas a diario. Prueba con una taza de ellas por día, según tu preferencia, o alternándolas. Verás prontamente los resultados.
 

 Por ende, nada mejor que aumentar el consumo de estas frutas a diario. Prueba con una taza de ellas por día, segíºn tu preferencia, o alternándolas. Verás prontamente los resultados.El ajo tambiín es otro de los excelentes remedios naturales contra la gota.

Nada mejor que, directamente, comer algunos dientes de ajo por día en ayunas. Dos o tres serán suficientes. Este vegetal que tantas propiedades tiene para luchar contra las enfermedades, permitirá que las toxinas sean eliminadas de tu cuerpo con mayor facilidad.Tambiín es muy importante la hidratación. Beber al menos dos litros diarios de agua, facilitará la micción y la eliminación de ácido burico.

Es totalmente recomendable comer con poca sal. Esta retiene líquidos y no permite una depuración correcta.Más allá de todo, es muy importante la alimentación que llevas adelante diariamente.

Debes eliminar el alcohol, algunas legumbres, los mariscos, los embutidos y las vísceras de animales. Todas estas cosas elevan notablemente la cantidad de ácido burico y, por ende, favorecen la inflamación que produce la gota.

Tratamiento contra la gota con cerezas

Las cerezas, dulces o agrias, se consideran eficaz en el tratamiento de la gota. Para comenzar, el paciente debe consumir cerca de 15 a 25 cerezas al día durante un tiempo. Cuando los síntomas se hayan calmado, cerca de diez cerezas al día guardarán la dolencia bajo control. Mientras que las cerezas frescas son las mejores, las conservadas también pueden ser utilizadas de vez en cuando.

Tratamiento para la gota usando los jugos vegetales

Los jugos vegetales crudos se utilizan para el tratamiento de la gota. El jugo de la zanahoria, conjuntamente con los de la remolacha y del pepino, son especialmente valiosos.
Mezcla 100 cc de jugo de remolacha, 100 cc de jugo del pepino y 300 cc de jugo de zanahoria, para hacer medio litro de jugo combinado y beber diariamente.

Remedio natural de manzana para la gota

Las manzanas son consideradas como fuente excelente para curar la gota. El ácido málico contenido en ellas puede neutralizar el ácido úrico y así producir el alivio de los malestares producidos por la gota. Se aconseja al paciente tomar una manzana después de cada comida.
Tratamiento de la gota con plátano
Una dieta de plátanos solamente por tres o cuatro días servirá para proporcionar un cierto alivio para la gota. El paciente puede tomar un plátano al día durante ocho o nueve días para calmar el malestar.

También es muy importante la hidratación. Beber al menos dos litros diarios de agua, facilitará la micción y la eliminación de ácido úrico. Es totalmente recomendable comer con poca sal. Esta retiene líquidos y no permite una depuración correcta.
 


miércoles, 15 de agosto de 2012

II . Cuidado de la Salud durante el Embarazo

Sueño

Es importante que duerma suficiente durante el embarazo. Su cuerpo está trabajando muy duro para acoger en su interior una nueva vida, de modo que se sentirá más cansada de lo habitual. Y, a medida que vaya creciendo el bebé, le costará cada vez más encontrar una postura cómoda para dormir.
Probablemente la postura que le resultará más cómoda a medida que vaya avanzando el embarazo será estirada sobre un costado con las rodillas flexionadas. Además esta postura facilita la función cardíaca, porque impide que el peso del bebé comprima las grandes venas y arterias que transportan sangre entre el corazón y las extremidades inferiores. Estirarse sobre un costado también ayuda a prevenir las varices, el estreñimiento, las hemorroides y las piernas hinchadas.
Algunos médicos recomiendan a las mujeres embarazadas dormir específicamente sobre el costado izquierdo. Puesto que una de las grandes venas pasa por la parte derecha del abdomen, estirarse sobre el costado izquierdo impide que el peso del útero la presione. Esta postura también optimiza el flujo sanguíneo hacia la placenta y, por tanto, la cantidad de oxigeno que le llega al bebé.
Pregúntele al profesional de la salud que supervise su embarazo qué postura de descanso recomienda. En la mayoría de los casos, descansar sobre cualquiera de los dos costados va bien y permite liberar a la espalda de parte del peso que tiene que cargar durante el día. Para estar más cómoda, póngase cojines entre las piernas, detrás de la espalda y debajo del vientre.
Cosas a evitar

Durante el embarazo, lo que evite introducirse en el cuerpo (o exponerse a ello) es casi tan importante como lo que introduzca en él. He aquí algunas sustancias a evitar:

Alcohol
Aunque beberse una copa de vino a la hora de cenar o tomarse una cerveza con los amigos de vez en cuando puede parecer inofensivo, nadie ha determinado cuál es la “cantidad segura" de alcohol que se puede tomar durante el embarazo. El alcohol, una de las causas más frecuentes de anomalías congénitas mentales y físicas, puede provocar problemas graves en un feto en proceso de desarrollo.
El alcohol llega fácilmente al feto, que está mucho menos preparado que la madre para eliminarlo de su organismo. Esto significa que el feto tiende a desarrollar una concentración de alcohol en sangre elevada, que permanecerá en su organismo durante períodos de tiempo más largos que en el organismo de la madre. Y el consumo moderado de alcohol, así como las borracheras periódicas, puede dejar secuelas en el sistema nervioso del bebé en proceso de desarrollo.
Si usted se tomó una o dos copas antes de saber que estaba embarazada (como hacen muchas mujeres), no se preocupe demasiado por ello. Pero, a partir de ahora, su mejor apuesta será no tomar ni una gota de alcohol durante el embarazo.

Drogas

Las mujeres embarazadas que consumen drogas exponen a sus bebés a múltiples riesgos, incluyendo el parto prematuro, el retraso del crecimiento, diversas anomalías congénitas y problemas de aprendizaje y de conducta. Y sus hijos podrían nacer siendo adictos a las drogas que ellas consumieron durante el embarazo.
Si usted está embarazada y consume drogas, organizaciones como la cadena de servicios sanitarios Planificación Familiar (Planned Parenthood) pueden recomendarle profesionales de la salud que ofrecen servicios gratuitos o a precios reducidos para que le ayuden a dejar las drogas y a tener un embarazo más sano.
Si usted ha consumido cualquier droga en algún momento durante el embarazo, es importante que informe al profesional de la salud que supervisa su embarazo. Aunque usted haya dejado de consumir drogas, su bebé podría correr el riesgo de desarrollar problemas de salud.
Nicotina

A usted no se le ocurriría encender un cigarrillo, ponérselo en la boca a su bebé y animarlo a dar una calada. Por ridícula que pueda parecerle esta escena, las mujeres embarazadas que continúan fumando están obligando a fumar al feto que llevan dentro. Las madres fumadoras transmiten nicotina y monóxido de carbono a los bebés que se están formando en sus vientres.
Los riesgos a que se expone el feto de una madre fumadora incluyen:
 •parto de bebé muerto
•parto prematuro
•bajo peso natal
•síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)
•asma y otros problemas respiratorios

Si usted fuma, tener un bebé puede ser una motivación adicional para abandonar ese hábito. Hable con su médico sobre las opciones disponibles para dejar de fumar.

Cafeína

El abuso de la cafeína se ha asociado a mayor riesgo de aborto, de modo que lo más sensato es que limite, o mejor que evite por completo, el consumo cafeína si es capaz de hacerlo.
Si se le está haciendo muy cuesta arriba dejar de golpe el café, pruebe lo siguiente:
 •Empiece reduciendo el consumo a una o dos tazas de café al día.
•Reduzca gradualmente la cantidad de cafeína ingerida combinando el café descafeinado con el café con cafeína.
•Al final, intente deje completamente de tomar café con cafeína de forma regular.

Y recuerde que la cafeína no se encuentra solamente en el café. Muchos tipos de tés, las bebidas de cola y otros refrescos contienen cafeína. Intente cambiarse a productos descafeinados (que es posible que contengan algo de cafeína, aunque en cantidades mucho menores) o a alternativas que no lleven cafeína.
Si se está preguntando si también debería dejar de tomar chocolate, que también contiene cafeína, la buena noticia es que puede tomarlo, aunque con moderación. Mientras que una tableta de chocolate contiene un promedio de entre cinco y 30 mg de cafeína, una taza de café contiene entre 95 y 135 mg. O sea que puede tomar pequeñas cantidades de chocolate durante el embarazo.
Ciertos alimentos

Aunque necesita comer abundantes alimentos saludables durante el embarazo, también necesita evitar las enfermedades que se pueden transmitir a través de alimentos, como la listeriosis y la toxoplasmosis, que pueden poner en peligro la vida del feto y provocar anomalías congénitas o abortos.
No pruebe los siguientes alimentos:
 •quesos cremosos no pasterizados (a menudo vendidos como “frescos”), incluyendo el queso feta, el de cabra, el Brie, el Camembert y el queso azul o Roquefort
•leche, zumos y sidra de manzana no pasterizados
•huevos crudos o alimentos que contengan huevo crudo, incluyendo las mousses, el tiramisú, las pastas elaboradas con masa insuficientemente cocida, los helados caseros y los aliños para ensaladas que contengan yema de huevo cruda (aunque algunas marcas de aliños de fabricación industrial pueden no contener huevo crudo)
•carne, pescado (sushi) o marisco crudos o poco hechos
•embutidos, fiambres o salchichas (a menos que se calienten hasta que empiecen a humear)

Asimismo, a pesar de que el pescado y el marisco pueden ser partes sumamente sanas de su dieta (al ser ricos en los beneficiosos ácidos grasos omega-3 y en proteínas y contener muy pocas grasas saturadas), debería evitar comer:
 •tiburón
•pez espada
•caballa gigante
•lofolátilo
•filetes de atún

Estos peces pueden contener niveles de mercurio elevados, que pueden provocar lesiones cerebrales en el feto en proceso de desarrollo. En lo que se refiere al consumo total de pescado y marisco, limite la cantidad a aproximadamente doce onzas (unos 340 g) a la semana -lo que corresponde aproximadamente a dos comidas. Asimismo, si toma atún en conserva, limite su consumo a no más de seis onzas (unos 170 g) a la semana. Y, antes de consumir ninguna especie pescada mediante pesca recreativa, consulte las recomendaciones locales.
Limpiar el cajón de los excrementos del gato

Si tienen gatos en casa, el embarazo es un período durante el cual debería abstenerse de limpiar el cajón de los excrementos de sus mascotas. ¿Por qué? Porque la toxoplasmosis se puede contraer al entrar en contacto con excrementos de gato y puede provocar graves problemas, incluyendo parto prematuro, retraso del crecimiento y graves anomalías oculares y cerebrales en el feto. Cuando una mujer embarazada contrae esta infección a menudo no presenta síntomas pero, aún y todo, puede transmitírsela al bebé en proceso de desarrollo.
Medicamentos de venta con y sin receta médica
Incluso algunos fármacos de venta sin receta médica de uso frecuente que, por lo general, son seguros están prohibidos durante el embarazo debido a sus posibles efectos adversos sobre el bebé. Y algunos medicamentos de venta con receta médica también pueden ser perjudiciales para el feto en proceso de desarrollo.
Para asegurarse de no tomar nada que podría ser perjudicial para el bebé:
 •Pregunte a su médico qué medicamentos -de venta con y sin receta médica- son seguros durante el embarazo.
•Informe a su médico sobre cualquier medicamento que esté tomando.
•Informe a todos los profesionales de la salud que le atiendan de que está embarazada para que lo tengan en cuenta cuando le recomienden o receten algún medicamento.
•Acuérdese también de comentar con a su médico cualquier remedio natural, suplemento o vitamina que se plantee tomar.

Si antes de quedarse embarazada le recetaron algún medicamento para una enfermedad o trastorno que todavía padece, consulte a su médico para que le ayude a sopesar los efectos beneficiosos y los riesgos potenciales de seguir medicándose y de dejar de hacerlo.
Si cae enferma (por ejemplo, se acatarra) o tiene síntomas molestos o dolorosos (por ejemplo, dolor de cabeza o de espalda), pregúntele a su médico qué medicamentos puede tomar y si hay formas alternativas de aliviarse los síntomas sin necesidad de medicarse.
Hábitos saludables durante el embarazo: de principio a fin
Durante todo el embarazo, desde la primera semana hasta la última, es muy importante que se cuide para cuidar a su bebé. A pesar de que deberá adoptar algunas precauciones y estar pendiente constantemente de cómo lo que hace -y lo que no hace- podría afectar al bebé, muchas mujeres aseguran que nunca se han sentido tan sanas como cuando estaban embarazadas.


I . Cuidado de la Salud durante el Embarazo


Ahora que está embarazada es más importante que nunca que se cuide. Por descontado, todo el mundo -su médico, sus familiares, sus amigos, sus compañeros de trabajo e incluso totales desconocidos- le darán consejos sobre lo que debería y no debería hacer durante el embarazo.
Pero mantenerse sana durante el embarazo solamente depende de usted, de modo que es fundamental que se informe bien sobre las muchas formas de cuidar de su salud y de la salud de su bebé durante el embarazo.
Examenes médicos
La clave para proteger la salud de su bebé está en hacerse examenes médicos prenatales regularmente. Si cree que puede estar embarazada, concierte una cita con el profesional de la salud que desea supervise su embarazo. Debería hacerse la primera revisión en cuanto crea que puede haberse quedado embarazada.
En el primer examen prenatal, el profesional de la salud que usted haya elegido probablemente le hará una prueba del embarazo y estimará de cuántas semanas está basándose en la exploración física y la fecha de su última menstruación. Utilizará esta información para predecir la fecha aproximada del parto (de todos modos, la ecografía que le harán cuando el embarazo esté más avanzado ayudará a corroborar esa fecha).
Si usted está sana y no hay ningún factor de riesgo que pueda complicar el embarazo, probablemente bastará con que se haga examenes prenatales:
 •cada cuatro semanas hasta la 28ª semana de embarazo
•a partir de entonces, cada dos semanas hasta la 36ª semana de embarazo
•y luego una vez por semana hasta el parto

A lo largo del embarazo, el profesional de la salud que supervise su embarazo la pesará y le tomará la tensión arterial al tiempo que evalúa el crecimiento y el desarrollo del bebé (palpándole el abdomen, midiéndole el vientre y escuchando el latido cardíaco del feto a partir del segundo trimestre de embarazo). A lo largo del embarazo, también le practicarán varias pruebas de diagnóstico prenatal, incluyendo análisis de sangre y de orina, exploraciones del cuello uterino y probablemente por lo menos una ecografía.
Si usted todavía no ha elegido un profesional de la salud para asesorarle y tratarle durante el embarazo, puede optar entre varias alternativas posibles:
 •Obstetras / ginecólogos (médicos especializados en el embarazo y el parto, aparte de en el apartado reproductor femenino y la salud de la mujer en general).
•Médicos de familia (médicos que ofrecen una amplia gama de servicios a pacientes de todas las edades -a veces incluyendo la obstetricia).
•Enfermeras-comadronas tituladas (enfermeras especializadas en las necesidades sanitarias de las mujeres embarazadas, incluyendo los cuidados prenatales y la atención durante el parto y el alumbramiento, así como los cuidados posparto en los embarazos sin complicaciones). También hay otros tipos de comadronas, pero usted siempre debería elegir una que pueda acreditar su formación y que esté especializada en este campo.

Cualquiera de estas opciones puede ser una buena elección si usted está sana y no hay ningún motivo para anticipar posibles complicaciones durante el embarazo. No obstante, las enfermeras-comadronas han de tener la posibilidad de acceder a un médico en el caso de que surjan problemas inesperados durante el parto o de que deba practicarse una cesárea.
Nutrición y suplementos
Ahora que usted está comiendo para dos (¡o más!), no es el mejor momento para escatimar calorías o ponerse a dieta. De hecho, ocurre justamente lo contrario -necesita aproximadamente 300 calorías diarias más, sobre todo cuando el embarazo esté bastante avanzado y el bebé crezca más deprisa. Si usted está muy delgada, es muy activa o espera gemelos, necesitará ingerir todavía más calorías. Pero, si tiene sobrepeso, es posible que su médico le recomiende no aumentar tanto la ingesta de calorías.
Comer de forma saludable siempre es importante y especialmente durante el embarazo. Por lo tanto, asegúrese de que las calorías que ingiere proceden de alimentos nutritivos que contribuirán al crecimiento y desarrollo del bebé.
Intente seguir una dieta equilibrada que incorpore los siguientes alimentos:
 •carne magra
•fruta
•verdura
•pan integral
•productos lácteos de bajo contenido en grasas

Si sigue una dieta saludable y equilibrada, tendrá más probabilidades de obtener los nutrientes que necesita. Pero necesitará más nutrientes esenciales (sobre todo calcio, hierro y ácido fólico) que antes de quedarse embarazada. El profesional de la salud que supervise su embarazo le recetará vitaminas prenatales para estar seguro de que tanto usted como su bebé en proceso de crecimiento se están alimentando bien.
De todos modos, el hecho de tomar vitaminas prenatales no significa que usted pueda seguir una dieta desequilibrada. Es importante que recuerde que debe alimentarse bien durante el embarazo. Las vitaminas prenatales son suplementos para completar la dieta, no la única fuente de esos nutrientes tan necesarios.

Calcio
La mayoría de mujeres de diecinueve años en adelante -incluyendo las que están embarazadas- no suelen ingerir diariamente los 1.000 mg de calcio recomendados. Debido a que los requerimientos de calcio de un bebé en proceso de crecimiento son altos, usted debería aumentar el aporte de calcio para impedir que se le descalcifiquen los huesos. Probablemente el suplemento vitamínico prenatal que le recete el médico contendrá calcio.
Entre las fuentes ricas en calcio se incluyen:
 •los productos lácteos bajos en grasas, incluyendo la leche, el queso pasterizado y el yogur
•los productos enriquecidos con calcio, como muchos los zumos de naranja comercializados, la leche de soja y los cereales
•las verduras de hoja verde oscuro, como las espinacas, la col rizada y el brócoli
•el tofu
•las judías secas
•las almendras

Hierro
Las mujeres embarazadas necesitan ingerir aproximadamente 30 mg de hierro cada día. ¿Por qué? Porque el hierro es necesario para fabricar hemoglobina, el componente de los glóbulos rojos encargado de transportar oxígeno. Los glóbulos rojos circulan por el cuerpo para transportar oxígeno a todas las células.
Si una persona no tiene suficiente hierro, su cuerpo no podrá fabricar suficientes glóbulos rojos y sus tejidos y órganos no recibirán el oxígeno que necesitan para funcionar correctamente. Por eso es especialmente importante que las mujeres embarazadas ingieran suficiente hierro a través de la dieta, tanto para su salud como para la de sus bebés es proceso de desarrollo.
A pesar de que este nutriente se puede encontrar en distintos tipos de alimentos, el hierro procedente de la carne se absorbe más fácilmente que el de origen vegetal. Entre los alimentos ricos en hierro se incluyen:
 •la carne roja
•la volatería de carne oscura
•el salmón
•los huevos
•el tofu
•los cereales enriquecidos con hierro
•las judías secas y los guisantes
•las frutas deshidratadas
•las verduras de hoja verde oscuro
•la melaza negra

Ácido fólico

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que todas las mujeres en edad de procrear -y sobre todo aquellas que quieran quedarse embarazadas- tomen un suplemento de 400 microgramos (0,4 mg) de ácido fólico cada día, aparte del ácido fólico ingerido a través de la dieta. Puede formar parte del suplemento multivitamínico prenatal o bien tomarse aparte
¿Por qué es tan importante el ácido fólico? Los estudios han mostrado que tomar suplementos de ácido fólico un mes antes de la concepción y durante los tres primeros meses de embarazo reduce en hasta el 70% el riesgo de que el bebé nazca con un defecto del tubo neural.
El tubo neural -que se forma durante las primeras semanas de embarazo, posiblemente antes de que una mujer sepa siquiera que está embarazada- acaba dando lugar al cerebro y la columna vertebral del bebé. Cuando el tubo neural no se forma o cierra correctamente, el resultado es un defecto del tubo neural, como la espina bífida.
De nuevo, el profesional de la salud que supervise su embarazo le recetará un suplemento multivitamínico prenatal que contenga la cantidad adecuada de ácido fólico. Algunos profesionales de la salud recomiendan incrementar todavía más el aporte de ácido fólico, especialmente en aquellas mujeres que han tenido previamente un hijo con un defecto del tubo neural.
Si usted adquiere un suplemento multivitamínico de venta sin receta médica, deberá tener en cuenta que, aunque la mayoría de ellos contienen ácido fólico, no todos contienen la cantidad adecuada para cubrir las necesidades nutricionales de una mujer embarazada. De modo que lea atentamente los prospectos de los distintos suplementos y pida consejo a su médico antes de adquirir uno.

Fluidos
También es importante beber abundante líquido, sobre todo agua, durante el embarazo. El volumen sanguíneo de una mujer aumenta espectacularmente durante el embarazo, y beber suficiente agua cada día puede ayudarle a evitar problemas bastante habituales durante el embarazo, como la deshidratación y el estreñimiento.

Ejercicio

El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (DHHS, por sus siglas en inglés) recomienda por lo menos 150 minutos (es decir, dos horas y media) a la semana de actividad aeróbica de intensidad moderada a aquellas mujeres que no sean muy activas de por sí ni realicen actividades vigorosas. Si usted es muy activa o está acostumbrada a realizar actividades aeróbicas de intensidad elevada, tal vez pueda continuar con los entrenamientos, siempre y cuando su médico lo considere seguro. No obstante, antes de iniciar o continuar con cualquier programa de ejercicio físico, hable primero con su médico.
Está demostrado que hacer ejercicio durante el embarazo es sumamente beneficioso. El ejercicio regular puede ayudar a:
 •impedir una ganancia de peso excesiva
•reducir los problemas asociados al embarazo, como el dolor de espalda, las piernas hinchadas y el estreñimiento
•dormir mejor
•aumentar la energía
•mejorar el aspecto físico
•prepararse para el parto
•reducir el tiempo de recuperación posparto

Las actividades de bajo impacto y moderada intensidad (como andar o nadar) son magníficas elecciones. El yoga o el método Pilates, así como los DVD o vídeos de gimnasia suave para embarazadas también son buenas opciones. Son actividades de bajo impacto y trabajan tanto la fuerza como la flexibilidad y la relajación.
Pero debería limitar el ejercicio aeróbico de gran impacto y evitar los deportes o actividades que conllevan un riesgo de caídas y/o de lesiones abdominales. Entre las actividades prohibidas durante el embarazo se incluyen los deportes de contacto, el esquí alpino, el submarinismo, y la equitación.
También es importante que sea consciente de los cambios que se están produciendo en su cuerpo. Durante el embarazo, su cuerpo produce una hormona denominada relaxina, que se cree que ayuda a preparar el área pubiana y el cuello uterino para el parto. Esta hormona afloja los ligamentos, lo que puede provocarle cierta pérdida de estabilidad y hacerle más proclive a las lesiones.
Por eso es más fácil que se haga torceduras o distensiones, sobre todo en lo que se refiere a las articulaciones de la pelvis, las lumbares y las rodillas. Además, su centro de gravedad cambiará conforme vaya avanzando el embarazo, lo que le hará perder más fácilmente el equilibrio e incrementará el riesgo de caídas. Tenga esto en cuenta a la hora de elegir una actividad física, y no se exceda.
Independientemente del tipo de ejercicio que elija, haga descansos frecuentemente y recuerde beber abundante líquido. Y déjese guiar por el sentido común: si nota que le falta el aliento, se empieza a encontrar mal o tiene alguna molestia, baje el ritmo o interrumpa la actividad. Si tiene alguna duda sobre la práctica de determinada actividad o deporte durante el embarazo, consulte a su médico para que le dé recomendaciones específicas al respecto.


Cuidados en el embarazo

A. La alimentación

La alimentación de la madre es fundamental para el futuro desarrollo de la niña o niño.
 Veamos:
1 Necesitamos una dieta variada. No es real eso de que hay alimentos prohibidos en el embarazo. Sólo dejamos de comer aquéllos que a nosotras no nos sientan bien
2 Tomaremos proteínas: huevos, leche, carne o pollo, hígado.
3 Muchos vegetales frescos y sobre todo los verdes claros y los oscuros, también papas, vegetales amarillos y anaranjados, varias veces a la semana.
4 Los cereales son indispensables, como la avena, el trigo, el arroz, el maíz, etcétera, nos dan minerales y además nos ayudan a no padecer estreñimiento.
5 Si tenemos náuseas podemos comer, en ayunas, pan tostado o una galleta sin sal.
6 Casi todas las mujeres necesitamos tomar calcio y hierro en pastillas durante el embarazo. Si no nos es posible comprar el hierro o si nos estriñe, podemos clavar uno o dos clavos de hierro en el centro de algunas manzanas crudas, y cuando éstas se pongan rojizas, nos las podemos comer.
Generalmente, la mujer embarazada sube 10 kilos todo el proceso de gestación.

Es falsa la idea de que se tiene que comer por dos. Cuando se come demasiado el parto podría ser más difícil debido al sobrepeso.
Los antojos pueden ser una señal de que algo le está faltando a nuestro cuerpo. Por ejemplo, si tenemos muchas ganas de limón puede ser porque nos haga falta vitamina C. Si nos dan ganas de comer la cal de la pared, u objetos hechos de loza o de barro, también podría estar faltándonos calcio o hierro.
Si has ido subiendo regularmente de peso y de repente subes más, chécalo con el médico. Puede deberse a retención de líquidos (toxemia), que puede llevar a la pérdida del feto o bebé, o a poner en peligro de muerte
a la embarazada.



B. La higiene

Hay enfermedades que pueden evitarse lavándose:
* Los dientes tres veces al día; las manos antes de cada comida y después de ir al baño.
 * Los genitales después de cada relación sexual.
Si tenemos hemorroides (pequeñas abultaciones que salen alrededor del ano y son dolorosas), podemos aliviar las molestias, poniéndonos hielo o tomando baños calientes, directamente en la zona afectada. El ano debe estar siempre limpio.


C. Evitar los factores dañinos

1 Alcohol, tabaquismo, virus (como el de rubéola), rayos X, medicamentos (barbitúricos, opiáceos, sedantes e hipnóticos).
2 Los analgésicos, (como aspirinas) que sirven para quitar dolores, atraviesan la bolsa que protege al bebé y pueden ser depresivos para éste, antes del nacimiento.
3 La anestesia, que anula la sensación de dolor, ya sea adormecimiento o haciendo desaparecer el dolor, también puede ser dañina para el bebé.


D. Hacer ejercicio moderado
Aunque las mujeres no paremos de trabajar con las tareas que se tienen en casa, lo que necesitamos es un ejercicio más completo de todo nuestro cuerpo.
* La espalda. Conforme la panza nos crece, se va doblando la cintura hacia atrás, y esto provoca dolor de espalda. Para evitarlo hay que pararse más derecha. Podemos pasar algunos minutos, varias veces al día, pegadas a la pared, de manera que sintamos que toda nuestra espalda toca la pared, con las piernas un poco inclinadas.
* Las várices. Para evitarlas, pongamos las piernas hacia arriba 15 minutos, por la mañana, por la tarde y por la noche. También podemos poner un cojín debajo del colchón. A la altura de los pies, para que éstos estén un poco más arriba, toda la noche.
Es posible que sintamos más sueño que antes del embarazo. Así que descansemos todo lo que se pueda. No se trata de estar siempre en reposo, a menos que sea necesario.
E. Las relaciones sexuales
Durante el embarazo, con todos los cambios hormonales que están ocurriendo, el deseo puede
disminuir, aunque a algunas mujeres sucede lo contrario. La pareja puede seguir teniendo relaciones sexuales durante el embarazo siempre y cuando ambos lo deseen. Si la mujer está cansada y no lo desea, debe plantearlo así.
En el último mes es importante evitar la penetración, ya que las contracciones de la matriz durante el orgasmo, pueden provocar la ruptura de la bolsa que cubre al bebé y, por lo tanto, precipitar el parto, Sin embargo, es fundamental que la mujer reciba caricias y viva su sexualidad de diferentes maneras, pero de un modo gratificante para ella.